Descripción
Esta obra proporciona una guía práctica y bien fundamentada de cómo abordar el tratamiento del riesgo penal empresarial. Propone una implantación de una política empresarial que busca beneficios –en sentido amplio– para las personas jurídicas. Sin duda, las empresas se muestran reacias a invertir los recursos necesarios para adecuar sus departamentos a las exigencias de la responsabilidad penal de las personas jurídicas. En el libro se demuestra por qué una decisión de ahorro de recursos a corto plazo puede tener consecuencias devastadoras a mediano y largo plazo.
Además, se explican los nuevos deberes de compliance impuestos a las empresas si no se tiene en cuenta el impacto que ha tenido la autorregulación empresarial en la sociedad moderna, puesto que no puede desconocerse que, con el modelo chileno de autorresponsabilidad penal empresarial, se transfiere a la empresa una parte importante del enforcement penal: son ellas las que tienen que prevenir la comisión de delitos, detectarlos cuando se han producido, investigarlos una vez detectados y reportarlos a las autoridades en caso de que así lo consideren procedente.
Para el cumplimiento de la meta referida, los autores se hacen cargo del tratamiento de las diferentes instituciones, a la luz tanto del Derecho Comercial como del Derecho Penal, con un adecuado y moderno tratamiento de la literatura jurídica y de la escasa jurisprudencia que existe en Chile sobre el tema.